Quisieramos expresar nuestra molestia y la molestia de muchos surfistas a lo largo de nuestra costa, a causa de uno de los engaños, y sin presendentes más grandes de la historia de la humanidad. Nos ha coartado de hacer nuestro hermoso y sano deporte que no contagia ni contamina a nadie. Muchos que han podido hacerlo tienen que estar a escondidas realizándolo pendientes de que no los parten o traten como delincuentes. Este engaño le costará muy caro a quienes están detrás de este maquiavélico plan social technocratico, que tiene en jaque a la humanidad y las economías mundiales.Que tiene a la gente sumida en la pobreza e incertidumbre a causa de este experimento viral.
No es posible que no podamos volver a surfear porque las calles están llenas de superhéroes que están peleando una guerra invisible, y que solo se preparan para defender los intereses de otros y nos tienen bloqueados nuestros point o te van a sacar de la playa. Saben que el engaño tarde o temprano se destapará y pasarán cosas.
Mientras tanto, mis tablas y los wetsuits de muchos juntan polvo y las ganas de entrar una vez más a mi querida maruja y sus días de marejadas.
Se extraña no poder ir a esas sesiones con lo vatos del club de surf, los sunset o las gélidas mañanas en el beach break de los sueños.
Esto le pasará la cuenta a los conspiradores y recuerden “QUE EL SURF” y como dice la frase que lei por ahí “NO ES UN CRIMEN” es el deporte más sano y limpio del mundo
texto/foto archivo/Pacheco